jueves, 12 de marzo de 2015

Wey Wu Wey significa: DEJAR EN PAZ

             Wu Wey es una expresión muy común en la filosofía china que se representa por la no-acción (Wey Wu Wey = hacer no-haciendo), pero sin embargo esta no-acción no es concebida como un dejar de hacer en la filosofía oriental sino que significa más bien un retorno a la espontaneidad, una transformación nietzscheana a la forma del niño, de quien podemos lograr que sus actos sean flexibles, libres y empujados por lo natural. Para Zhuang zhi se torna necesario DEJAR EN PAZ al mundo, así como NO INTERVENIR en él.  
        En el reino de Yao, éste quiso gobernar a su gente de tal forma que se sintieran en contacto con su naturaleza;en este reino ya no hubo tranquilidad. En el reino de Jie se quiso que los hombres renegaran hasta odiar su naturaleza; en este reino ya no hubo alegría. El Yin y el Yang son las fuerzas que constantemente alteran la naturaleza de cada cosa y las despista de su camino, distrayéndolas. Sin embargo, son estas mismas fuerzas las que son capaces de regular las dosis de sentimiento en las cosas para que haya una estabilidad natural. A los hombres siempre se les ha enseñado a obrar mediante los premios y los castigos, mas no basta la grandeza del universo para premiar o castigar. Si los hombres insisten en modificar o alterar la naturaleza de otras cosas, solamente provocan la alteración tanto de su estabilidad natural como la estabilidad de la cosa a la que quieren modificar. Por lo tanto, un hombre que se vea forzado a gobernar siempre será mejor que siga la expresión Wu Wey. Un hombre preparado para gobernar se siente en sintonía con la naturaleza, y se pregunta: "¿Qué necesidad tengo yo de gobernar?"  
        Los valores positivos en la cultural occidental como lo son la sabiduría, el conocimiento, la justicia, la benevolencia, etc, se tornan positivos cuando se encuentran estables en la naturaleza de uno; así, estos valores en una persona o bien existen, o bien no. Sin embargo, si no se encuentran estables, provocarán en el hombre confusión y alboroto, incluso en el mundo. Curiosamente en este segundo punto es cuando la gente del mundo comienza a dar importancia y a tener en gran alta estima estos valores. Así, maltratan su cuerpo hasta asimilar la benevolencia y la justicia, y agotan su energía para construir leyes y normas que los limiten. Todo ha hecho el hombre para escapar de sí mismo, mas ¿habrá servido de algo?  
        Un mente en sintonía con el Wu Wey es como la mente de un niño que juega, únicamente por jugar, sin haber estado condicionado bajo prejuicios o costumbres, es la mente en conexión con su naturaleza. Es muy importante el concepto de vacío en esta expresión, ya que la mente debe ser un espacio vació el cual se llena de espontaneidad, que es la naturaleza. Por tanto no necesitará preguntarse por el porqué de las cosas, ni siquiera por las cosas mismas, al igual que el Sol no tiene no necesita ser consciente de que da calor a las cosas del mundo para que esto sea un hecho. El hombre sabio no necesita hacer saber a los demás de su sabiduría, ya que entonces el pueblo se dividirá y desconfiarán unos de otros, alterando su virtud. El hombre sabio es quien no deja huella al caminar, es quien se esconde en las montañas y se siente igual a cualquier hombre. La virtud no se encuentra en las cosas buenas, pues un esceso de cosas buenas también es una alteración de la naturaleza que puede tornarse en un camino dificíl. La virtud consiste en respetar las fuerzas del Yin y del Yang, y respetar los tiempos de calma y tormenta.  
Por eso, 


 "El hombre de bondad superior es como el agua. La bondad del agua consiste en que a todos sirve sin conflicto. Mora en los lugares que todo hombre desprecia. Por ello está próxima al Tao". 


Tao te Ching, Lao Tsé.

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